Fratris Didaci Stellae … Tomus secundus, 1577
Las Enarrationes sobre el Evangelio de San Lucas constituye un tratado evangélico escrito por Fray Diego de Estella o Didacus Stellae, nombre por el que es conocido Diego San Cristóbal-Ballesteros y Cruzat de Ortiz de Eguía y Jaso (Estella, Navarra, 13 de abril de 1524- Salamanca, 1578) religioso franciscano, teólogo, humanista y escritor ascético español. En 1573 publica su obra latina In Sacrosanctum Jesu Christi Domini Nostri Evangelium secundum Lucam Enarrationum (Salamanca, 1574-1575), que conocida de forma abreviada como las Enarrationes (explicaciones), constituye una polémica interpretación del evangelio de San Lucas en la que se atacan los vicios de los poderosos, príncipes y señores en forma de represiones duras y descarnadas.
Las Enarrationes sobre el Evangelio de San Lucas constituye un tratado evangélico escrito por Fray Diego de Estella o Didacus Stellae, nombre por el que es conocido Diego San Cristóbal-Ballesteros y Cruzat de Ortiz de Eguía y Jaso (Estella, Navarra, 13 de abril de 1524 – Salamanca, 1578) religioso franciscano, teólogo, humanista y escritor ascético español
Sobrino de San Francisco Javier, estudió en las universidades de Toulouse y Salamanca, llegando a dominar el griego y el hebreo. En Salamanca recibía las influencias de los también franciscanos Alonso de Castro y Andrés de Vega. En 1541 ingresaba como franciscano en el convento de la Orden en Salamanca, en 1541. Felipe II le nombró su consultor, predicador y teólogo. Desde 1573 vivía retirado en el Convento de San Francisco de Salamanca, momento en el que recibía la licencia para imprimir su obra latina In Sacrosanctum Jesu Christi Domini Nostri Evangelium secundum Lucam Enarrationum (Salamanca, 1574-1575). Esta interpretación del evangelio de San Juan —conocida de forma abreviada como las Enarrationes (explicaciones)—, sería su obra más polémica.
La obra, en la que se atacan los vicios de los poderosos, príncipes y señores en forma de represiones duras y descarnadas, tras haber pasado numerosas aprobaciones previas de afamados teólogos, es censurada por la Inquisición, y numerosos ejemplares de la misma son requisados en Sevilla. En efecto, el Santo Oficio expurgó un total de treinta y dos pasajes del tratado, que sufrió numerosas correcciones hasta que en 1580 se autorizó su venta pública (se contabilizan alrededor de veintidós ediciones en ciudades como Alcalá, Lyon, Amberes,Venecia o Maguncia).